Existen un montón de actividades sencillas para disfrutar al aire libre juntos en familia. Una de las cosas que nos gusta hacer es pasear por la playa al atardecer e improvisar un picnic mientras el papi va de pesca en kayac y los pequeños juegan a ser princesas y piratas en busca de tesoros.
Nuestro botín es de lo más variado, caracolas para collares, cristales de mil colores y pulidos por la arena para usar como joyas, piedras con formas curiosas o lisas en las que luego podamos pintar y palitos de madera con los que haremos desde una espada hasta lo que la imaginación nos permita.
NUESTRO "BOTÍN". |
No es la primera vez que reutilizo elementos naturales para decorar en casa, los encuentro con más encanto y personalidad, y hay ocasiones en las que la inspiración viene sola y te pones manos a la obra para reconvertirlo en lo que le tienes destinado, como es el caso de Mi árbol de los deseos o de Una lámpara que engancha, y otras en las que no, por lo tanto ante tal cantidad de tesoros encontrados y no queriendo faltar a mi principio de "no tirar nada", investigué un poco qué poder hacer con ellos, y por fin di con este modelo de espejo con marco de madera de Crate and Barrel ideal para darle una nueva vida a todos los palitos recogidos.
Aún no me he puesto a ello, pero desde aquí me comprometo a que si consigo hacer un espejo medio digno, enseñaros el paso a paso y el resultado final.¡Qué maravilloso resulta crear algo para que cada rincón de casa te haga recordar historias vividas en familia!.
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